lunes, 19 de noviembre de 2012

Un murmullo

Las olas tienen como encanto
que envueltas en un murmullo
vienen y van...

Pero, 
aunque lo parezca,
las olas, como todo,
nunca  vienen dos veces,
las olas no vienen y van
las olas simplemente vienen 
y se van.

Tal vez sea ese 
el real encanto de la olas,
que vienen y se van
y en su llegada y a su partida 
nos dejan su murmullo
de recuerdo.

jueves, 11 de octubre de 2012

Con fe en la vida

Amar es un acto de fe
de dos
que coinciden por azar
y que encuentran en el otro
lo que sienten por dentro.

Amar es un acto de fe
que mueve la voluntad
de dos
a estar
a dar
a creer
a esperar
a hacer
y todo por simple hecho,
por el gusto,
por la emoción
de hacerlo,
por el uno,
por el otro,
por los dos,
sin lugar,
sin medida,
sin tiempo,
sin condición.

Amar es un acto de fe
que no deja dudas,
que orienta,
que calma,
que sana,
a dos, que no se saben,
que no se sienten
que no se piensan,
como dos.

Amar es un acto de fe,
de dos
que creen a ciegas,
en su propio Dios.

Amar,
es tan solo eso,
un cotidiano acto de fe,
de dos
que se necesitan,
para vivir,

porque saben
que amar...
es confiar en la vida.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Suelas y sueños

Mis zapatos, se han acabado,
están punto de hoyo,
de un agujero en cada suela.

Mis zapatos están a punto de irse,
de lograr su independencia,
de lograr su libertad,
de empezar a andar solos, por ellos mismos,
sin mí.

Y me duele…
porque no soy hombre de muchos pares,
y estos,
los he usado a diario
desde hace ya
seis o siete años.

Ya les hice su lifting, su liposucción,
ya los repinté, ya los embadurné de betún;
(ya les echó mano el zapatero, hasta dos veces)
pero ya no pueden, ya no pueden seguirme,
ya no pueden más con mi andar.
Ya dieron de sí, por darme a mí.

La historia es sencilla.
Hace años un diciembre me llegó un regalo,
un par de zapatos que no me gustaron,
o que no eran para mí,
porque al ir a cambiarlos,
estos los mios de siempre
ya me estaban esperando.

Y empezamos a andar…

Y con ellos anduve,
(como dice Violeta)
ciudades y charcos,
playas y desiertos,
montañas y llanos,
y la casa tuya tu calle y tu patio.

Y escucharon mis conversaciones
y saben de ellas…
y se volvieron mis confidentes,
silenciosos, solitarios.

Y saben estar, jo, que si saben estar,
(lo sé, porque me acompañaron).

Estuvieron con reyes, sultanes,
príncipes,ministros,
directores, empresarios,
embajadores,
jueces,imanes, sacerdotes,
banqueros, artistas, decanos, 
coroneles, vicealmirantes,
investigadores,pilotos de caza,
cirujanos,
mucha gente de postín y de renombre;
pero sobre todo estuvieron, 
con gente común, gente feliz,
gente de la calle,
gente del pueblo, buena, bella,
como mis amigos,
como mi familia,
como mi hijo,
como tú.

Ah...y estuvieron también con presos,
minusválidos, enfermos, desamparados, 
y alguno que otro difunto, triste,
que murió en algún hotel, mal muerto y a destiempo.

Y estuvieron, estuvimos,en lugares excluyentes,
(yates, clubes, comedores privados, consistorios, alcaldías...),
en lugares interesantes,
(hangares militares, laboratorios,  siderúgicas, mezquitas,...),
en lugares comúnes,
(salas de conciertos, tiendas, cines, baños públicos, restaurantes...),
y hasta en lugares que dicen que cuentan que estan hechizados...
(bodegas con folletos y salones con chimineas...)

Y saben de los sitios que más me gustan
(y lo saben porque fui con ellos, ellos me llevaron):
Museos, bares, parques, barrios, callejuelas con encanto.

Y saben de todos esos sitios especiales,
a los que he ido sólo o acompañado,
y en los que más me he emocionado,
y cuando...

Y saben de mis escapadas y locuras
de todas esas mis esperas sin sentido,
sentado en los maceteros,
de algún jardín;
y saben de mis carreras a lo loco,
por las calles, 
persiguiendo un sueño
del que soy siervo
y del que nunca, nunca,
seré dueño.

Se van mis zapatos,
algo de mí se llevan,
y algo de tí,
también.

martes, 11 de septiembre de 2012

Ciclos

Sol, horizonte, mar,
vapor, río, nube,
lluvia, lago, agua.

Rayos, calor.

Y te vas y regresas,
y regresas y te vas.
Fin sin principio ni fin.
Pescadilla  que se muerde la cola.

Sal,sudor, saliva, piel.

Gotas, sed.

Y yo,
te sigo esperando,
alma, ciclo vital, aliento,
para llenarme de ti.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Compañera, amiga, confidente.

Al final....mi guitarra, siempre mi guitarra.

miércoles, 27 de junio de 2012

Reloj cucú.

Atemporalmente,
tic tac, tic tac,
infinitamente,
tic tac, tic tac,
te amo.

A diario,
tic tac, tic tac,
siempre en presente,
tic tac, tic tac,
te amo.

Así sencillamente,
tic tac, tic tac,
aún en futuro,
tic tac, tic tac,
te amo.

Y en pasado,
tic tac, tic tac,
y después también,
tic tac, tic tac,
te amo.

Tú tranquila,
tic tac, tic tac,
pues he podido,
tic tac, tic tac,
puedo y podré,
tic tac, tic tac,
seguir esperando.

Y así,
tic tac, tic tac,
te espero,
tic tac, tic tac,
te amo,
tic tac, tic tac,
hasta que un día
tic tac, tic tac,
por unos segundos
tic tac, tic tac,
el reloj haga
cú cú cú cú cú cú
y aparezcas cantando
¡ tú tú tú tú!




viernes, 15 de junio de 2012

Esperando a Eric

Estoy en la luna mirando absorto,
detrás del manto negro de la noche,
 la infinitud del universo.

Y me doy cuenta que frente a todo esto,
soy infinitamente mucho menos
que casi nada.

Estoy en la luna mirando
entre las galaxias y las distancias,
a esta pequeña gran grandeza
que es la tierra.

Estoy mirándola maravillado,
y desde mi pequeñez admiro
ese don
que sólo ella tiene
y que le otorga
un lugar exclusivo
en la vastedad del universo:

La vida.

Tan sensible, tan frágil,
tan como tú, tan de tu agua,
tan de tus nubes, de tu aire,
tan de tus desiertos, los dos,
los de hielo y los de arena,
tan de tu verde en los bosques,
lava en tus volcanes,
y profundidad en los mares.

Tan de tus montañas,
de tus valles, de tus ríos,
de tus flores, de tus árboles,
de tus peces, de tus aves,
tan de tus nidos, tus perros, tus gatos,
insectos, bacterias,
tan madre de todos, de todo,
tan de ti, tan de tu vientre,
tu simiente, tan de tu vida.

Y yo sigo en la luna
sintiéndome
infinitesimalmente pequeño
frente a este sentimiento de amor
que desde ti fluye,
que se dirige hacia mí, hacia todos,
hacia el mundo,
y que nos invita
a ser parte del misterio, del milagro,
que es un niño viviendo en un vientre,
dentro de una madre, 
en la tierra, en el universo,
y todo siendo por ser, al mismo tiempo.

Sigo en la luna,
mirando en el manto negro de la noche
la infinitud del cosmos,
y yo no sé qué me maravilla más,
qué me arroba más,
qué me hace sentir desde mi pequeñez,
tan inmenso como el universo:
si la tierra, la vida
o el amor que gracias a ti,
puede haber en ella.

martes, 29 de mayo de 2012

Alma de madera viva

Piensen lo que quieran, pero no digan que es un ser inerte.
No.
No piensen que es inerte y que por ser un simple mueble,
su alma es solamente una estructura de madera.
No.

Si lo hubiesen conocido, a pesar de no ser un ser vivo:
Descartes diría que su alma es res extensa, porque existe, pero no posee consciencia.
Espinoza vería que su alma es atributo y modo, de la sustancia divina.
Leibniz encontraría en él, en vez de alma, una mónada, como elemento último del universo, encerrada en sí misma.
Lessing la encontraría como aspiración infinita.
Kant afirmaría que su alma es imposibilidad de aprehender lo absoluto.
Fichte señalaría que es saber y acción.
Hegel comentaría que su alma es auto-desarrollo de la idea.
Schelling la definiría como potencia divina.
Nietzche diría que su alma es un ente imaginario, para acercarse a Dios.
Freud que es la diferencia entre el ego y el super ego.
Jaspers que es su existencialidad.
Heidegger su ser-ahí, su Dasein.
Bloch su realización originaria del futuro.

No importa lo que ellos filosofasen, ni lo que debatieran en torno al alma, si hubiesen conocido al mueble, se habrían dado cuenta, que por su origen y a pesar de su materialidad, todas esas ideas bien valen para definir su alma.

Más que eso.

Buda diría que este mueble, sobrio, sencillo y elegante, nació poseyendo esa energía trascendente, invisible e inmensurable que se deriva de los actos, de las palabras y de los pensamientos pasados.
Porque este mueble sabe muchas historias.
Porque este mueble vivió y sufrió la tristeza, el desengaño y el dolor, antes de nacer.
Porque este mueble nació viejo. Nació con karmas.

Es cierto.

A este mueble lo rechazaron y lo reprocharon tristemente cuando todavía era una idea. A este mueble no lo querían y al no quererle, no le permitían ser y mucho menos estar. Lo negaban, y al negarlo, moría antes de nacer.

Pero ese mueble que como idea ya se sentía morir, como la intensión, como la pulsión, como la voluntad y la energía vital que era, fue buscando su corporeidad para materializarse, y buscó ser y buscó estar aún a pesar de los reproches, aún a pesar de los rechazos, aún a pesar del dolor sentido.

Y si ese mueble está ahí, fue por esa fuerza interior, vital y generadora que luchó por liberarse. Fue por esa fuerza de voluntad que se transformó en ánimo; y ya saben, el ánimo cuando empuja, cuando se enciende, cuando genera, cuando empieza a andar, se anima y entonces, se vuelve ánima y el ánima, cuando se sublima, se transforma en alma.

Y si ese mueble está ahí, y si ahora es admirado por todos y luce sencillo y elegante, fue por la intensión, la paciencia y la perseverancia de un alma que actuó desde la congruencia de siempre escucharse y de seguirse a sí misma, que fluyó siéndose fiel a pesar del dolor, la decepción y el rechazo sentidos. Un alma que sabe que no hay mayor tristeza y desolación que vivir negando la voz interior de su corazón. Un alma que vive profundamente agradecida con la vida, y que ahora, como alma que es, ha dado vida a ese mueble. 

Piensen lo que quieran, pero por favor, no digan que este mueble no tiene alma, pues desde antes de nacer, este mueble lleva inherente a él, el sentido de la vida misma.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Música interior

No siempre, pero en momentos de particular sensibilidad,
tengo la capacidad de escuchar música en mi interior, sin tararearla.

Es música que surge desde mis fibras más sensibles,
cuando el eco de mi vida pasada, 
o este amor puro en la presente,
me invitan a sentir.

Parece una falsedad,
pero si se tiene una sutil impronta,
es fácil lograrlo.

Si quieren saber a lo que me refiero,
cierren los ojos
y escuchen la risa de un niño de tres años,
reverberando en ustedes.

Estoy seguro de que en este mismo instante,
ya la han escuchado.
Estoy seguro de que esa su música interior,
ya los ha llenado de vida.

Así escucho yo tu risa, 
mi pequeño colibrí, 
como esa música interior
que me llena de vida.

viernes, 20 de abril de 2012

Naturalmente

Yo lobeo noche-estrella-errante
por las montañas del sentir-pienso
corriendo rumbo abajo al marbosque
según centellea el ríonieve descalzotoño
en plenilunios amplios y di-versos.

Me gusta, naturalmente.

Sin embargo,
Igual-aguamente que un jardín floreado arcoiriseando
se alegra del fresco aire-viento ligero nutriaficante,
yo me felizhierbeo luciernagosto y cielo 
de tu lagoamor en calma y germinando.

Y cuando entre risarayos y musicarroyos,
palmeamos nubes de aurora y ocasos luneros
(cual almendros-en fronda-primavera)
Pistilo gineceas irradiamos siemprevida
entre orquideas-amor, besos largos y soleades.

Me gustas, naturalmente.


jueves, 19 de abril de 2012

Por siempre jamás.

Y mirar al cielo y convertirse en alma,
Y mirar al cielo y vivir los sueños,
Y mirar al cielo y recorrer los mundos,
y mirar la luna, los tiempos, el universo...
infinito.

Y mirar al cielo y perseguir estrellas,
Y mirar al cielo y pedir deseos,
Y mirar al cielo en silencio, lejano,
y detrás de las nubes, encontrarte a ti…
siempre.

Y mirar la tierra y recorrerla toda,
Y mirar la tierra y vivir mundano,
Y mirar la tierra y dejarse llover
respirar, latir, besar la vida lento…
finita.

Y mirar la tierra y dormir en ella,
Y mirar la tierra y sentirse humano,
Y mirar la tierra en silencio, cercano,
Y mirar la tierra y no encontrarte a ti…
jamás.

miércoles, 4 de abril de 2012

Derivadas e integrales.

Todos derivan, pocos integran.

Derivando…

Dos en función del otro.
En la medida de su cambio,
variables de sus valores e independencia.

Uno con su vida,
la otra con su amor.

Dos en función del otro.
En el cálculo de sus límites
de la rapidez de su intervalo y sus puntos dados.

Uno con su amor,
la otra con su vida.

Todos derivan, pocos integran.

Integrando…

Sumando infinitos, 
somos uno en vidamor. 

Tan fácil que es ¿no?

jueves, 29 de marzo de 2012

Tiempos...

Me explicaba mi amiga María Menal, anticuaria, que un objeto puede ser considerado una antigüedad si tiene al menos 50 años.

Sin embargo, mi hijo, de tres años, en lo que se refiere a dataciones, es más riguroso al respecto.

Doy fe de ello, sean testigos.

Es de mañana. Se para frente al televisor.  Ve una cápsula informativa..."Así éramos hace 100 años: los parques de atracciones". Se pone ahí y ve toda la cápsula informativa, tres minutos, de pe a pa, paradito calladito. Ve, observa, cómo eran los parques de atracciones en España hace 100, 75, 50, 25 años...

Termina la cápsula. Se queda en silencio, calladito, pensando...yo lo miro, lo observo. Él de pronto, se voltea y me dice:

- Esos son los hombres "prehicóricos" ¿no, papá?

martes, 27 de marzo de 2012

Escala

Contigo en Mí...
Do-y
Re-cibo
Sol, luz, luna,
estrellas, dicha.

Contigo en mí
La-vida
Es Fá-cil
En Sí.

jueves, 15 de marzo de 2012

Sombras y espacios

Se revuelve el tiempo en su propio paso,
siempre nos empuja hacia adelante;
aunque a veces nos sorprende,
cazador furtivo, por detrás.

Se revuelve el tiempo en su propio paso,
y en ese andar su desandar
nos remite, de repente,   
a otros pagos lejanos y olvidados.

Tiempo y espacio, separados,
son como sombras de universos;
pero cuando son uno solo,
son luz, claridad,
fotones de memoria,
recuerdos liberados.

Se revuelve el tiempo en su propio paso.
Nos proyecta sin querer a los espacios.
Tiempo y espacio son sombras,
que sólo existen si uno le da su luz.

Así siempre lo he pensado,
porque así siempre lo he sentido.

Con el sol tocándome la espalda,
pensando en presente,
y a la vez, en pasado,
como muchas muchas otras veces
voy andando por la calle despacio.

Camino y sigo a mi sombra.
Camina ella alargada junto a la de mi hijo.
Juegan las sombras, se divierte el niño.

Y veo esas dos sombras tomadas de la mano,
una caminando pausada, la otra, dando saltos;
y esas sombras me llevan de nuevo
a otro lugar, a otro mundo,
a ese pago de recuerdos, de imaginarios,
en otro tiempo, en otro espacio,
que se vuelven, como siempre, dentro de mí,  
tetradimensionados.

Y esas sombras me devuelven a aquel lugar,
en donde seguir una sombra era el juego,
y en donde la magia del juego
no era más que encontrarse a uno mismo
como ente como ser, en un espacio 
plano, oscuro y unidimensionado.

Y ese tiempo revuelto en magia,
ese espacio de recuerdos e imaginarios,
me devuelven a los sitios
en donde mi sombra jugaba a que la buscara
escondiéndose detrás de otra sombra
o al lugar en donde esa sombra
jugaba a librarse de mí,
huyendo de la luz, porque entonces la luz,
no era todavía, ni fotones de memoria,
ni recuerdos liberados.

Este tiempo revuelto entre una, dos, tres
y cuatro dimensiones,
me devuelve a ese espacio ingenuo, tierno,
sencillo infantil adimenisonado,
en donde mi sombra caminaba, se escondía,  
y jugaba a dar saltos junto a la sombras
de mi padre, de mi abuelo o de mi hermano.

He caminado muchas veces con mi sombra,
pero nada ha sido igual, como andar y jugar
por la calles y los espacios,
junto a la sombra de mi hijo.