lunes, 5 de diciembre de 2011

Palabra de poesía

No quiero que estés junto a mí domesticada.
No quiero que hagas prosa de tu vida.

Te quiero libre, inefable, lúdica, salvaje;
precisa, amorosa...como palabra de poesía.

domingo, 4 de diciembre de 2011

En caja fuerte.

- Buenos dias.
- Buenas noches.
- ¿Cómo estas?
-¿Cómo te sientes?
- ¿Cómo te fué?
- ¿Caminamos?
- Dáme tu mano.
- Discúlpame, lo siento.
- ¿Lo hablamos?
- Te equivocaste.
- No importa, sigamos.
- Tienes otra oportunidad.
- Sé tú cual eres, como eres, como quieras ser.
- Por mí no cambies.
- Nada te pido, dáme de tí lo que quieras.
- Es tu decisión, te apoyo.
- ¿Cómo, dime tú?
- Te perdono.
- Lo entiendo.
- No pasa nada.
- Apaga y ven...te espero.
- Tu me entiendes.
- Como tú, nadie.
- Contigo hasta el final.
- ¿Te acuerdas?
- Abrázame.
- Dáme un beso.
- Dáme otro.
- ¿Quieres?
- ¿Qué piensas?
-¿Qué sientes?
- ¿Cuál ha sido tu experiencia?
- ¿Te ayudo?
- ¿Porqué, porqué, porqué?
- Y ahora ¿hacia dónde vamos?
- Te sigo.
- Sí, sí, sí, sí... y después ya veremos ...
- Quiero estar contigo.
- Me gusta estar contigo.
- Quédate.
- ¡¡¡Qué bien te ves!!!
- ¡¡¡Me encantas!!!
- Te deseo.
- Hagamos el amor.
- Por favor.
- Te invito.
- Pide, yo pago.
- Ayúdame, no puedo.
- ¿Voy por tí?
- ¿Paso por tí?
- ¿Te espero?
- Te espero.
- ¿Me ayudas?
- Confío en tí.
- Me llenas.
- Me tienes.
- Te quiero.
- Te pienso.
- Te siento.
- No sabes cuánto te extraño.
- ¿Cómo estas?
- ¿Qué necesitas?
- Quiero verte.
-¿Cuándo te veo?
- Gracias, corazón.
- Te amo.

Quien tenga todo esto,
que lo guarde en caja fuerte
Pues si le falta, verá,
que tiene más joyas,
que las que la Corona tiene.