miércoles, 7 de julio de 2010

Nigromancia

Acabo de recibir la noticia de que una cuenta bancaria que tengo en Estados Unidos la congelaron; así, como si estuviese en la morgue en vez de en un banco; porque, según dijeron, como la cuenta no tenía movimiento desde hace tiempo,a mí ya me habían dado por muerto.

Mis padres fueron a San Antonio, y haciendo gala de sus artes nigrománticas, descongelaron la cuenta.

Ahora resulta que no estoy muerto.Resucité.

Déjenme decirles que resucitar no es doloroso.
Lo digo porque, con esta, es la segunda vez que me pasa esto de volver a la vida.
La primera vez que volví a la vida, fue en una reencarnación.
La reencarnación sí que es un cosa dolorosa.
Aquella vez, se me reencarnó una uña del pie, y ahí sí que siente uno la muerte.

En fin, valga este pasaje para demostrar que si tienes una cuenta sin movimiento es como si estuvieras muerto y que siempre hay vida después del dinero.

1 comentario:

Miranda Hooker dijo...

jajaja, me sonó al párrafo añadido de la canción "El muerto vivo". Hay que irse de parranda a celebrar que, efectivamente, haya vida después del dinero.

Hay tanta gente que cava su propia tumba creyendo lo contrario.